Marcus Ericsson consiguió hoy la victoria más importante de su carrera tras ganar la edición 106 de las 500 Millas de Indianápolis. El piloto sueco no aparecía entre los candidatos, pero tras la última ronda de detenciones en pits a 20 del final, se puso líder y luego se defendió con todo del mexicano Pato O' Ward en las últimas dos vueltas para cobrar su primer triunfo en el mítico Brickyard.

Estaba otro piloto del equipo Ganassi para llevarse la victoria, pero una penalización por exceso de velocidad tras su última parada en pits acabó con las opciones de Scott Dixon de ganar su segunda Indy 500. El neozelandés, que largaba desde la Pole Position, estuvo intercambiando el liderato primero con Alex Palou y luego con O'Ward durante buena parte de la prueba, y era el hombre a vencer hasta que cometió ese error.

Y es que el español, actual campeón de la categoría, también estaba en una inmejorable posición para luchar por el triunfo cuando vino el accidente del joven Callum Illot en la vuelta 69. El de Ganassi ya había puesto rumbo a los pits cuando estos se cerraron y tuvo que volver a entrar para hacer su detención, lo que lo dejó en los últimos lugares y fuera de secuencia.

En segunda posición terminó Pato O'Ward. El mexicano del Arrow McLaren SP fue gran animador de la carrera luchando por la primera posición en varios momentos. Incluso se puso líder y logró abrir un gap de más de 1 segundo pasado el giro 150, pero su ventaja desapareció tras la cuarta bandera amarilla del día provocada por el accidente del piloto de Penske Scott McLaughlin.

A 10 vueltas del final el duelo por la victoria se redujo al 'Pato', que se las tuvo que arreglar para recuperar la posición con su compañero Rosenqvist tras las últimas detenciones, y Ericcson que ya estaba líder. El ex F1 ya saboreaba la leche cuando cayó la última bandera amarilla a 5 del final por un accidente de Jimmie Johnson, otro de sus compañeros de equipo.

En ese momento dirección de carrera decidió sacar bandera roja y darnos un final emocionante. El de Monterrey atacó y buscó por todos lados, pero Ericcson no aflojó. Hubiera tenido un último intento el de Arrow McLaren, pero el choque de Sage Karam, y la consecuente amarilla, le impidió lanzar un nuevo ataque.

El veterano Tony Kanaan en una carrera sólida y sin sobresaltos cruzó la meta tercero seguido de Felix Rosenqvist y Alexander Rossi quienes completaron las 5 primeras posiciones.

El Top 10 lo conformaron Conor Daly, que incluso llego a liderar la competencia sobre la vuelta 81, Helio Castroneves y Simon Pagenaud, ambos pilotos del Meyer Shank Racing, Alex Palou, que tras su doble paso por los pits se puso en modo remontada y escaló hasta el 9º y Santino Ferrucci.

Juan Pablo Montoya terminó muy cerca de los 10 primeros en la 11ª posición. El colombiano hizo una carrera inteligente y progresivamente fue ganando posiciones tras cada ronda de paradas en pits. Eso sí, nos dejó un buen par de adelantamientos muy a su estilo, pero lo cierto es que su posición de partida condicionó sus opciones de luchar por el triunfo.

La carrera tuvo varios abandonos, la mayoría por accidentes. Víctimas de la infame curva 2 fueron Rinus VeeKay que chocó en la vuelta 39 cuando rodaba en 3ª posición, Callum Illot, otro ex F1 Romain Grosjean en su estreno en Indy 500 con Andretti a mitad de carrera, Scott McLaughlin a 50 del final en una jornada para el olvido para el equipo Penske, Jimmie Johnson y Sage Karam. Colton Herta también se retiró prematuramente, pero su abandono se debió a inconvenientes técnicos en su auto.

La victoria de Ericsson es la segunda de un piloto sueco en las 500 Millas de Indianápolis, tras la conseguida por Kenny Brack en 1999. Este además es el quinto triunfo del equipo Chip Ganassi en esta emblemática prueba: al de Marcus se suman dos de Dario Franchitti en el 2010 y 2012, Scott Dixon en 2008 y Juan Pablo Montoya en el 2000.