Tras el decepcionante resultado en Imola, Ferrari no quiere ceder más puntos y afronta el Gran Premio de Miami con algunas novedades. La más importante es que Charles Leclerc estrenará un nuevo motor (el segundo de la temporada) con más potencia gracias a actualizaciones de los mapas y el MGU-K. Ambos monoplazas llevarán un nuevo alerón trasero de carga baja-media y además probarán el nuevo fondo plano que Carlos Sainz utilizó en los test de Pirelli.


En el caso de Leclerc el cambio de motor no es por un problema, el objetivo es no perder pisada frente a Red Bull en el desarrollo y tener los mismos elementos que su compañero de equipo. Sainz estrenó su segundo motor en Imola como precaución luego de su abandono en Australia. Esta actualización estaba prevista para el Gran Premio de España, pero en Ferrari no se fían y decidieron adelantarla una carrera.

El circuito urbano de Miami es un trazado de 5,41 km que cuenta con 19 curvas, tres rectas, posibilidad de tres zonas de DRS y una velocidad máxima estimada de 320 km/h, por lo que las actualizaciones que llevarán las F1-75 apuntan a compensar la diferencia de velocidad con el monoplaza de Red Bull.

Durante las Prácticas Libres Ferrari también probará un suelo del tren delantero que cuenta con un aditamento (que ya llevan los autos de Milton Keynes) y que uso Carlos Sainz en los test de Pirelli la semana pasada. Este debería ser una solución para limitar el efecto del porpoising.