El ex piloto de Fórmula 1 y Campeón del Mundo de 2007, Kimi Raikkönen, cree que su quinto puesto en el Rally de Turquía, marcará un punto de inflexión en el Campeonato del Mundo de Rallyes (WRC).

Raikkönen fue uno de los pocos pilotos que consiguió finalizar la prueba turca sin problemas, logrando además su mejor resultado en el WRC y finalizando por segunda vez consecutiva dentro de la zona de puntos, tras ser octavo en Jordania.

Y todo esto pesar de que el de Turquía fue sólo el tercer rally de tierra para Raikkönen con el Citroën C4 WRC, y la segunda carrera que ha logrado finalizar con el auto en esta superficie.

"Es un indicio de que vamos en la dirección adecuada", ha comentado el finlandés de 30 años. "En Jordania no controlamos tan bien la velocidad, pero finalizamos el rally; en Turquía fue un poco mejor y nos clasificamos quintos. De hecho, no hicimos nada muy distinto, fue sólo cuestión de tener más experiencia con el auto y trabajar con el sistema de notas. Hubo sitios en los que me sentí más seguro y otros en los que menos, pero un resultado como éste desde luego ayuda".

Raikkönen no estará presente en la próxima prueba del Mundial de Rallyes, el de Nueva Zelanda, pero espera poder hacer test con su montura del Citroën Junior Team antes de su siguiente carrera, el Rallye de Portugal, a finales de mayo.

Su copiloto Kaj Lindstrom también ha comentado que Raikkonen se está adaptando bien al sistema de notas, que según él mismo reconoce, es el aspecto más complicado al que se enfrenta el Campeón del Mundo de Fórmula 1 2007 en su cambio al WRC.

"La forma en que toma las notas y cómo reacciona a ellas es mucho mejor, ha dicho Lindstrom. "Era cuestión de tener más experiencia para saber cómo tiene que detallarlas. En Turquía no tuvimos ningún problema, así que creo que es muy alentador de cara al futuro. Está claro que Kimi es rápido, tan sólo hay que asegurarse de que todo lo demás funcione correctamente".