Los comisarios del Gran Premio de Japón han recibido una protesta por parte de Racing Point F1 Team en contra de Renault F1 Team, debido a irregularidades deportivas y técnicas que podrían estar favoreciendo a la escuadra francesa.

Según Racing Point, su rival estaría utilizando un sistema de ajuste predeterminado del balance de frenado en los autos de Daniel Ricciardo y Nico Hülkenberg.

Ante esta protesta, los comisarios citaron a los representantes de los dos equipos y a un delegado del departamento técnico de la FIA. Posteriormente las autoridades determinaron que la protesta cumple con todos los requerimientos que consigna el Artículo 13 del Código Internacional del Deporte y por consiguiente es admisible. Este punto fue acordado por los representantes de Renault.

El representante del departamento técnico de FIA fue orientado a sellar y confiscar las unidades de control electrónico (ECU) y los volantes de los dos autos de Renault, para realizarles un análisis detallado.

Además, se indica al representante que realice un análisis detallado de hardware, software y datos asociados con ellos y, cuando estén completos, proporcione un informe escrito a los comisarios con sus resultados, para incluir una evaluación que coincida con esos hallazgos contra las posibles infracciones técnicas detalladas en la protesta.

El representante está autorizado en nombre de los comisarios a solicitar asistencia técnica externa, incluyendo a los representantes de Renault y Racing Point, para la realización de su evaluación.

Cuando se determine la probable fecha de presentación, el representante del departamento técnico de la FIA se lo comunicará a la junta de comisarios, para que en la próxima reunión la evaluación de los alegatos de la protesta puedan ser programados.

Ante esta situación, los resultados del Gran Premio de Japón aún no serían definitivos, ya que de encontrarse una irregularidad en los autos de Renault, estarían en riesgo el sexto y décimo lugar de Daniel Ricciardo y Nico Hülkenberg respectivamente en Suzuka.

De acuerdo al artículo 11.1.3 de las regulaciones técnicas de la Fórmula 1 - 2019, indica que cualquier dispositivo alimentado, diferente al sistema que se establece en el artículo 11.9, el cual sea capaz de alterar la configuración o afectar el rendimiento en cualquier parte del sistema de frenos, está prohibido.

El artículo 11.9 señala que la presión en el circuito trasero de los frenos debe ser provisto por un sistema de control en el que: a) El pedal del freno del piloto esté conectado a un cilindro maestro hidráulico que genere una fuente de presión que pueda ser aplicada al circuito de frenado trasero si el sistema de alimentación está deshabilitado. b) El sistema de alimentación esté administrado por control electrónico descrito en el artículo 8.2. (Sistemas homologados y aprobados por FIA).

Ahora hay que esperar el resultado de la evaluación del representante técnico de la FIA.