Si bien el taco es la solución más rápida y popular, los expertos y profesionales del sector automotor tienen una opinión clara sobre cuál método ofrece la reparación más duradera y segura para la estructura de la llanta.


El taco: Rápido auxilio, ¿Solución temporal?

El taco (también conocido como mecha o tapón) es, sin duda, la herramienta de auxilio más utilizada por conductores y motociclistas. Es ideal para sacarnos de un apuro en medio de la vía, ya que permite sellar el agujero sin necesidad de desmontar el caucho del rin.

Ventajas del taco:

• Rapidez: La reparación se hace en minutos.

• Practicidad: No requiere herramientas especializadas ni desmontar la rueda.

• Emergencia: Es perfecto para un 'desvare' inmediato en carretera.


El gran 'pero':

Los especialistas en llantas coinciden en que el taco debe considerarse una solución temporal y de emergencia. Al insertarse, esta mecha de caucho impregnada de pegamento penetra a la fuerza, y en el proceso, puede generar un daño adicional:

"El taco sella el agujero exteriormente, pero al ser introducido, puede romper o debilitar las lonas internas o la estructura radial de la llanta, comprometiendo su rigidez interna. Es un paliativo, no una reparación estructural", dicen los expertos.

Una reparación hecha con taco debe ser revisada lo antes posible por un montallantas profesional para buscar una solución más definitiva.


El parche: La reparación definitiva

El parche (interno) es el método de reparación preferido por los profesionales y el que garantiza la mayor durabilidad y seguridad para la llanta. Su proceso es más riguroso y requiere desmontar la rueda para acceder a la cara interior del neumático.

Ventajas del Parche:

• Seguridad Estructural: El parche sella el daño desde el interior, manteniendo intacta la estructura radial de la llanta.

• Permanencia: Es considerada una reparación permanente que puede durar toda la vida útil restante del neumático.

• Sellado Completo: Permite limpiar y lijar la zona afectada internamente, asegurando una adhesión total y sin burbujas.


Tipos de parche:

• Parche Frío: Se adhiere por componentes químicos, es el más común.

• Parche Caliente (vulcanización): Utiliza calor y presión para fusionar el parche con la goma de la llanta, creando una unión casi homogénea. Se utiliza en daños más grandes.

• Parche-Seta o "sombrilla": Combina un pequeño tapón que sella el orificio de lado a lado con un parche interno, ofreciendo lo mejor de ambos mundos en términos de sellado y resistencia estructural.


El Veredicto

La elección es clara si se prioriza la seguridad, la vida útil y el rendimiento de la llanta.

Si bien el taco (mecha) destaca por ser una reparación muy rápida y de fácil aplicación, su uso está limitado a una solución temporal o de emergencia. Esto se debe a que conlleva un Riesgo de daño interno para la integridad estructural de la llanta.

En contraste, el parche (interno) ofrece una solución permanente que reserva la estructura de la llanta, aunque su proceso es lento y requiere el desmontaje de la rueda. Por lo tanto, el Uso recomendado para el taco es en carretera solo para llegar a un taller, mientras que el parche es la opción de reparación definitiva y profesional.


En conclusión, el taco es una excelente herramienta para salir del apuro e ir hasta el taller más cercano. Sin embargo, la reparación definitiva y más segura para su vehículo es siempre el parche (o parche-seta), instalado por un profesional que desmonte la llanta e inspeccione el daño interno.

Recuerde siempre verificar la presión y, tras cualquier reparación, realizar el balanceo de la rueda para evitar vibraciones y desgaste irregular.