El nuevo Audi S8 combina un lujo progresivo con la actitud dinámica propia de un atleta, a la vez que confirma su reputación como referencia del lema de la marca, A la vanguardia de la técnica, con sus innovadores sistemas de suspensión. Su motor 4.0 TFSI -un bloque de ocho cilindros biturbo- rinde 571 hp y hace gala de un contundente par máximo de 800 Nm. Se combina con la tecnología MHEV para una perfecta simbiosis entre eficiencia y confort, ofreciendo además un elevado nivel de prestaciones. La suspensión activa predictiva, la dirección a las cuatro ruedas y la transmisión quattro con diferencial trasero deportivo proporcionan una extraordinaria dinámica de conducción. El nuevo Audi S8 emplea elementos específicos de diseño para expresar con total precisión la deportiva elegancia de la refinada berlina de lujo.


Elegancia deportiva

El diseño exterior progresivo, elegante y fluido del Audi A8 se complementa con algunos detalles nuevos y específicos en el S8. Atrevidos elementos, tanto en el interior como en el exterior, afinan con precisión su carácter deportivo. Hay disponibles ruedas de hasta 21 pulgadas de diámetro para esta berlina deportiva de 5,17 metros de longitud. Detalles en el paragolpes delantero, en los faldones laterales y en las carcasas de los retrovisores, así como las salidas de escape dobles a cada lado características de los modelos S, enfatizan el carácter deportivo y progresivo. El paquete de estilo negro está disponible opcionalmente.


Los clientes pueden elegir entre nueve refinadas combinaciones y diseños, incluyendo el color plata pastel de Audi design selection para el espacioso habitáculo, que sugiere el ambiente relajado de un salón de lujo. Aquí, la nueva inserción superior, exclusiva para el Audi S8, está confeccionada en Carbon Vector con un efecto especial 3D que transmite profundidad. Se complementa con una inserción inferior en aluminio cepillado mate. Las opciones de iluminación incluyen faros Audi HD Matrix LED con luz láser y grupos ópticos traseros OLED.

Con su configuración V8 y su tecnología de hibridación ligera (Mild Hybrid), el motor de alto rendimiento del Audi S8 ofrece una suavidad máxima. Su potencia de 571 hp, un par motor de 800 Nm y sus dos turbocompresores permiten que haya empuje de sobra disponible para cualquier situación. La velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h. Las camisas de fundición de los cilindros, dentro del bloque de aluminio, reducen la fricción de cara a un funcionamiento excepcionalmente suave. Las mariposas del sistema de escape activadas automáticamente realzan el impresionante sonido.


La emoción y las prestaciones propias de un auto deportivo se ven acompañadas por el confort y la eficiencia energética. El sistema Mild Hybrid (MHEV) funciona continuamente para reducir el consumo de combustible y las emisiones. Su alternador/motor de arranque de 48 voltios accionado por correa, y la batería de iones de litio, posibilitan avanzar por inercia con el motor desactivado, así como un rápido arranque y una amplia gama de funcionamiento del sistema start-stop. En conducción habitual, es posible un ahorro de combustible de hasta 0,8 litros cada 100 kilómetros. El sistema cylinder-on-demand, que desactiva individualmente una bancada de cilindros en situaciones de carga reducida, proporciona una eficiencia adicional. El sistema de audio del vehículo dispone de cancelación activa de sonido para eliminar el ruido intrusivo en el habitáculo y así lograr un mayor confort.


Dinámica de conducción: suspensión activa, dirección integral y tracción quattro con diferencial deportivo trasero

La combinación única de componentes innovadores en la suspensión permite al buque insignia cumplir con la amplia gama de características, que van desde la confortable y refinada marcha de crucero de un lujoso sedán, al ágil comportamiento dinámico de un deportivo.


El nuevo S8 equipa de serie la suspensión activa predictiva. Este sistema de alta tecnología, que funciona en combinación con la suspensión neumática, puede hacer subir o bajar cada rueda individualmente por medio de actuadores electromecánicos. Por tanto, permite controlar por primera vez y de forma activa la posición de la carrocería en cualquier situación de conducción, reduciendo así notablemente los movimientos de cabeceo de la carrocería al acelerar o frenar, así como el balanceo lateral. La cámara frontal, que detecta irregularidades del pavimento de cierta entidad, permite que esto se haga de forma predictiva.