por Schumi nº1 » Dom Oct 08, 2006 2:18 pm
Desastre total. Éste podría ser el titular de algún periódico italiano para mañana.
Los problemas de motor de Ferrari son preocupantes, ya que en dos carreras ha habido dos roturas. No olvidemos que el motor de Michael era el que estaba "tocado" en China. Con Raikkonen en Ferrari hay que asegurar un motor bien fuerte.
No sé hasta qué punto la rotura ha podido ser causada por un exceso del uso de rpm, puesto que Michael supongo que esperaba una carrera relativamente fácil con Massa detrás. El error en la estrategia de Massa ha sido garrafal; debía salir delante de Alonso tras el primer pit-stop como fuera.
Si alguien es tan amable de subir el vídeo donde Michael anima a sus mecánicos, le estaré agradecido. En once años que hace que sigo la F1 cada semana, nunca me he ido a mitad de carrera. En ninguna del año pasado, ni en Jerez 97, nunca hasta hoy me he perdido por decisión propia ni un segundo de F1. Tal era, y es, mi decepción que no podía aguantar ni un segundo más viendo una carrera que ya no tenía ningún sentido para mí.
El desastre de hoy es comparable al de 1998, precisamente en Suzuka. Es curioso que, desde ese momento, Schumacher no ha perdido ningún mundial de tú a tú. En el 99, el accidente, de 2000 a 2004, triunfos y en 2005 no hubo lucha. A pesar de todo, si no se lucha no se pierde, y todos los tifosi le estamos agradecidos por la ilusión que nos ha dado. Prefiero perderlo así que no a mitad de campeonato como el año pasado.
Hay que aferrarse a las mínimas posibilidades que quedan, aunque es casi imposible. El próximo GP, el último de Michael, traerá muchas emociones para todos.
Felicidades a los alonsistas del foro por este triunfo. Hay que reconocer que al menos este año ha sido difícil.
Saludos,
Schumi nº1
Edito: Leo que Massa ha sufrido un pinchazo que ha condicionado toda su táctica...
Re-edito: Recuerdo que hace algunos meses decía que sería bonito que, ahora que Suzuka cae del calendario, se decidiera el campeonato en el trazado nipón, como tantos y tantos años. ¡No ha sido nada bonito!
