Ayer en el Yas Marina Circuit las escuderías Mercedes, Ferrari y Red Bull han concluido las pruebas programadas por Pirelli con los nuevos neumáticos anchos, los cuales se utilizarán desde el próximo año en la F1. Se han utilizado autos modificados de la temporada 2015, simulando las cargas aerodinámicas que se tendrán en 2017 para ser aproximadamente cinco segundos por vuelta más veloces.

Han sido en total 24 las sesiones de pruebas realizadas durante este año en Mugello, Barcelona, Paul Ricard y Yas Marina, en las cuales estos tres equipos han podido utilizar diferentes componentes y estructuras.

Los tres autos completaron en la sesión de ayer un total de 331 vueltas, equivalentes a 1.839 km o la distancia de seis Grandes Premios de Abu Dhabi. Se ensayaron 96 prototipos diferentes entre todos los equipos, utilizando una variedad de especificaciones para maximizar la recopilación de datos.


Los pilotos que participaron fueron: Lewis Hamilton y Pascal Wehrlein (Mercedes), Daniel Ricciardo y Max Verstappen (Red Bull) y Kimi Räikkönen (Ferrari).

El director de Pirelli Motorsport, Paul Hembery, expresó: "Para el último test del año, tuvimos cinco pilotos titulares de Fórmula 1 en nuestros prototipos de 2017 y hemos completado el programa de desarrollo con los tres autos al mismo tiempo. Ahora el arduo trabajo comienza, ya que analizaremos los resultados de nuestros 24 días de pruebas y aproximadamente 12.000 kms, con el objetivo de definir los neumáticos que competirán el próximo año.

Estos los tendrán los autos de 2017 durante las pruebas oficiales en febrero. Nuestros últimos tests en Abu Dhabi salieron de acuerdo al plan y logramos recopilar la información que necesitábamos gracias a los tres autos adaptados por parte de Mercedes, Red Bull y Ferrari. Sin ellos hubiese sido imposible llevar a cabo este intenso programa de desarrollo", declaró el directivo británico.